Hay que saber cómo hidratar la piel, por ello existen dos opciones que suelen ser las más empleadas por las chicas hoy en día, para así conseguir que su piel se vea mejor, se trata del body milk o el aceite vegetal que hidrata la piel y consigue que luzca más brillante y atractiva.
Con todos los agentes externos a los que sometemos a nuestra piel, más nos vale utilizar un buen hidratante para cuidarla.
Cada vez se nos ofrecen más opciones de cómo cuidar nuestra piel, de cómo darle una apariencia de hidratación y de salud. Body milk, aceites corporales e incluso geles con agentes hidratantes entre su composición llenan las estanterías de los supermercados, pero, ¿cuál es el mejor para nuestra piel?
Lo que conocemos como “body milk” hace referencia a los productos cosméticos que son de una rápida absorción y suaves al tacto, Estos son productos que brindan gran hidratación al cuerpo de la mujer, y se debe prestar atención a las materias primas que lo componen.
Aceite corporal: piel suave, pero con cuidado
Antes de que surgieran los body milk o leches corporales, ya existían los aceites. Johnsons es la marca más vendida de este producto, también la que más tradición tiene. Y aunque existe una leyenda urbana sobre que es algo para aplicar sólo en la piel de los bebés, es apto (incluso recomendable) para todos los miembros de la familia. Independientemente de la edad, sobre todo las mujeres con la piel seca.
Su mayor facilidad y rapidez a la hora de aplicarlo hace que cada vez gane más adeptos. Y es que después de la ducha, con la piel todavía húmeda, el aceite resbala mejor. Una vez aplicado hay que secarse normalmente. Pero cuidado a la hora de secar: las toallas se manchan más, aunque no es nada que no quite una buena lavadora. Y si no te secas bien pueden quedar restos que más tarde mancharán la ropa. Quitando este inconveniente, los efectos sobre la piel son espectaculares: suavidad e hidratación extra.
Un buen momento en el que nadie debería olvidar aplicarse un buen aceite corporal es después de la depilación, ya que en esos momentos la piel está más sensible, y necesitamos algo que nos alivie y, al mismo tiempo, que nos hidrate.
Body milk, sécate bien y después aplica
Cuando tienes tiempo suficiente la leche corporal puede resultar una buena opción para hidratar. Pero cuenta con el inconveniente de que, una vez te has duchado, tienes que estar bien seco para aplicarla. En caso contrario, sus efectos disminuirán debido a la mezcla pringosa que se crea, y que no sirve para hidratar.
Muchos de estos body milk vienen de regalo con colonias, por lo que tienen más efecto de perfume que de hidratante.
Geles con agentes hidratantes
Cada vez más marcas se suben al carro de añadir agentes hidratantes a sus geles. Por lo que, en caso de utilizar estos productos a la hora de ducharnos, no es necesario aplicarse después aceite o leche corporal. Son sobre todo una buena opción para aquéllos que siempre van con prisa, ya que su piel estará hidratada sin tener que perder tiempo en aplicarse productos específicos.