El maquillaje es un gran aliado a la hora de lucir bien y mejorar tu apariencia, pero cuando este no es aplicado en la manera correcta o con técnicas y estilos que no van contigo, este podría resultar realmente desfavorecedor y hacerte ver envejecida. Y es que además de los desastres de moda y estilo que se pudiesen ocasionar con un maquillaje mal aplicado, también pudieses lograr sumarte más años de los que en realidad tienes, lo cual es lo contrario a lo que deberías lograr.
Y es que el uso de cosméticos es realmente aplicado con la finalidad de mejorar tu imagen, de darte una apariencia más juvenil, fresca y hacerte lucir muy hermosa, destacando esas facciones que más te favorecen, a la vez que disimulas las no te favorecen demasiado o simplemente no te agradan a ti.
Todo procedimiento tiene su técnica, que al ser aplicada de manera eficaz debe lograr destacar ese resultado fabuloso que estás buscando. Los maquilladores y profesionales de la estética, afortunadamente han invertido mucho tiempo y esfuerzo en crear diversas maneras para ayudarte a lograr los mejores resultados.
7 errores fatales de maquillaje que te envejecerán
Y nosotros, que siempre nos interesamos en tu bienestar y belleza, hemos preparado un listado con 7 errores fatales de maquillaje que te envejecerán, para que tengas claro cuáles son y dejes de cometerlos si lo haces o los evites si es que aún no los has cometido. Sigue leyendo y adquiere el valioso conocimiento que necesitas para lucir hermosa y juvenil con el maquillaje.
Base facial equivocada o no usarla:
Este cosmético es calificado por los expertos del maquillaje como uno de los básicos más esenciales a la hora de arreglar tu rostro, e insisten que sin este no es posible lograr resultados excelentes y profesionales. Pero tan mal como no usar base es usar la base facial que no es ideal para ti.
No usar o aplicar la base que no te favorece contribuye a que las arrugas o cualquier mancha o imperfección se note mucho más, cuando aplicas la correcta (tono, textura y cantidad), puedes darle a tu piel una apariencia suave, tersa y renovada. Verifica que sea del tono de tu cara probándola en tu cuello y no al dorso de la mano como hacen muchas, busca una que sea de textura ligera y aplícala con una broncha para un acabado uniforme y profesional.
Labios oscuros:
Usar colores intensos como el rojo, púrpura o cualquier tono oscuro puede agregar seriedad y hacerte lucir mayor. Estos tonos, aunque elegantes y sofisticados, tienden a endurecer los rasgos faciales y restar frescura a tu apariencia.
Si tu objetivo es lucir más joven y fresca, opta por colores más suaves como el rosa, melocotón o los brillos labiales. Estos tonos no solo aportan un aire juvenil y alegre, sino que también iluminan tu rostro, creando una imagen ligera y vibrante. Además, se adaptan a cualquier estilo, permitiéndote verte moderna y elegante a la vez.
Sombras oscuras:
Al igual que los labiales, las sombras de ojos en tonos oscuros como el negro, morado o naranja intenso pueden agregar años a tu apariencia, creando un efecto pesado y serio. Si prefieres un look más joven y natural, opta por sombras en tonos pastel, claros o metálicos suaves, como el rosa, el melocotón o incluso los tonos perlados.
Estos colores no solo rejuvenecen la mirada, sino que también aportan luminosidad y suavidad al rostro, realzando tus ojos de una manera sutil pero impactante. Recuerda que lo simple y fresco siempre es más favorecedor.
Ojos cargados:
El uso excesivo de delineador, máscara de pestañas, y sombras en tonos oscuros puede crear un efecto sobrecargado que no favorece a una apariencia juvenil. Un maquillaje excesivo en los ojos tiende a restar naturalidad y añade una sensación de pesadez a la mirada.
Si lo que buscas es un aspecto más joven, lo mejor es optar por un delineado ligero, sombras claras y un toque sutil de rímel. De esta forma, tus ojos se verán más grandes, brillantes y frescos, sin caer en el exceso de maquillaje.
Excesos:
El maquillaje en exceso siempre puede jugar en contra de una imagen fresca y juvenil. La regla de oro es «menos es más». Un maquillaje minimalista, con toques estratégicos que resalten tu belleza natural, es la clave para un look que destaque sin exagerar. Aplicar demasiados productos no solo puede añadir años, sino que también puede ocultar lo mejor de tu rostro. Mantén un equilibrio, resaltando solo lo necesario para lucir natural y radiante.
Olvidar el corrector:
El corrector es una herramienta fundamental para un maquillaje exitoso, especialmente si se trata de ocultar signos de fatiga, ojeras o pequeñas imperfecciones. No usarlo correctamente puede hacer que el rostro luzca apagado o cansado.
Aplicarlo de manera estratégica bajo los ojos y en las zonas con imperfecciones te ayudará a lucir una piel más uniforme y rejuvenecida. Es importante difuminarlo bien para evitar que se marquen las líneas de expresión y obtener un acabado natural.
Olvidar tus pómulos:
Los pómulos son clave para dar un aire juvenil y fresco al rostro. Aplicar un rubor adecuado en tonos suaves es esencial para conseguir esa apariencia. Si tienes la piel clara, los tonos rosa pálido o pastel son ideales, mientras que si tu tez es más morena, los tonos melocotón o bronce aportarán calidez y frescura. No olvides difuminar bien el rubor para que el acabado sea natural y favorecedor, creando un efecto de piel saludable y radiante.