Los síntomas que pueden aparecer 24 horas antes de sufrir un infarto

El infarto agudo de miocardio, comúnmente conocido como ataque al corazón, es una afección médica grave que puede ser potencialmente mortal. Uno de los aspectos más preocupantes de un infarto es que, en muchos casos, los síntomas pueden aparecer de manera sutil o incluso ser completamente imperceptibles hasta que ocurre el evento.

Sin embargo, en algunos casos, hay señales que pueden manifestarse hasta 24 horas antes de sufrir un infarto, lo que brinda una ventana de tiempo para buscar atención médica y posiblemente prevenir un daño mayor.

A continuación, se describen algunos de los síntomas que pueden actuar como indicadores previos a un infarto:

Fatiga inusual

La fatiga persistente y abrumadora que no puede atribuirse a un esfuerzo físico o a la falta de sueño es una señal que a menudo pasa desapercibida. Las personas pueden sentirse extremadamente cansadas o con una debilidad inexplicable en los días previos a un infarto.

Dificultad para respirar

La falta de aire o la dificultad para respirar pueden ser un signo de que algo no está bien con el corazón. Puedes sentirte agitado o experimentar una opresión en el pecho, lo que puede ser un síntoma anticipatorio.

Malestar en el pecho

Aunque el dolor en el pecho es un síntoma clásico de un infarto, en algunos casos, puede manifestarse de manera intermitente o como una sensación de presión incómoda en lugar de un dolor agudo. Este malestar puede ser intermitente y durar varios minutos.

Sudoración excesiva

La sudoración excesiva, especialmente si no está relacionada con el calor o la actividad física, puede ser un signo de alerta. Las personas que están a punto de sufrir un infarto pueden experimentar sudores fríos incluso en condiciones normales.

Dolor en otras áreas del cuerpo

Aunque el dolor en el pecho es característico, algunas personas pueden experimentar dolor o molestias en otras áreas, como el brazo izquierdo, la mandíbula, la espalda o el abdomen. Este dolor puede irradiar desde el pecho y variar en intensidad.

Náuseas o vómitos

Las náuseas y los vómitos, especialmente si se presentan sin una razón aparente, pueden ser señales anticipatorias de un infarto. Algunas personas pueden atribuir estos síntomas a problemas gastrointestinales en lugar de relacionarlos con el corazón.

Mareos o desmayos

Los episodios de mareos o la sensación de que te vas a desmayar pueden ocurrir antes de un infarto. Esto puede estar relacionado con una disminución del flujo sanguíneo al cerebro debido a problemas cardíacos.

Ansiedad o inquietud

Sentir una creciente ansiedad o una sensación de inquietud inexplicada también puede ser un síntoma anticipatorio. Algunas personas pueden experimentar una sensación de «presentimiento» o malestar emocional antes de un infarto.

Cambios en el ritmo cardíaco

Los cambios en el ritmo cardíaco, como palpitaciones o arritmias, pueden ser signos de advertencia. Estos cambios pueden ser percibidos como una aceleración repentina o una sensación de que el corazón está «saltando».

Cambios en la presión arterial

Las fluctuaciones en la presión arterial, ya sea un aumento o una disminución repentina, pueden ser indicativas de problemas cardíacos inminentes.

Es importante destacar que los síntomas previos a un infarto pueden variar ampliamente de una persona a otra, y algunas personas pueden experimentar una combinación de estos síntomas, mientras que otras pueden no experimentar ninguno.

Ante cualquier señal de alarma o malestar inexplicable, especialmente si tienes factores de riesgo para enfermedades cardíacas, es esencial buscar atención médica de inmediato. Detectar y tratar un infarto de manera temprana puede marcar la diferencia en el resultado y la recuperación.

La prevención también juega un papel fundamental, por lo que mantener un estilo de vida saludable y controlar los factores de riesgo, como la hipertensión y el colesterol alto, es fundamental para reducir la probabilidad de sufrir un infarto.