El dolor de cadera en las mujeres puede ser una señal de alerta que afecta la movilidad, el sueño y la calidad de vida. Entre las múltiples causas posibles, la bursitis trocantérica destaca como una de las más comunes, especialmente en mujeres adultas.
Esta inflamación de la bursa, una bolsa llena de líquido que amortigua la articulación de la cadera, puede causar molestias intensas y limitar las actividades diarias. Este artículo explora por qué la bursitis trocantérica es una causa frecuente de dolor de cadera en mujeres, detalla sus síntomas, factores de riesgo y estrategias de manejo, todo respaldado por evidencia científica y un enfoque práctico para el alivio.
¿Por qué la bursitis trocantérica es tan común en mujeres?
La bursitis trocantérica ocurre cuando la bursa ubicada en el trocánter mayor (la protuberancia ósea en la parte externa de la cadera) se inflama debido a presión repetitiva, lesiones o condiciones subyacentes.
Las mujeres son más propensas a esta afección debido a factores anatómicos, hormonales y de estilo de vida. Según Journal of Orthopaedic & Sports Physical Therapy (2019), las mujeres tienen un riesgo hasta 3 veces mayor que los hombres de desarrollar bursitis trocantérica, especialmente entre los 40 y 60 años.
Factores que contribuyen
- Anatomía pélvica: Las mujeres tienen una pelvis más ancha, lo que altera la alineación de la cadera y ejerce mayor presión sobre la bursa, según Clinical Orthopaedics and Related Research (2018).
- Cambios hormonales: Las fluctuaciones hormonales, como durante la menopausia, pueden debilitar los tejidos conectivos, aumentando la inflamación, per Arthritis Research & Therapy (2020).
- Actividades repetitivas: Correr, subir escaleras o estar de pie por largos periodos puede irritar la bursa, especialmente en mujeres activas.
- Condiciones asociadas: Problemas como la artritis, escoliosis o diferencias en la longitud de las piernas incrementan el riesgo.
Síntomas de la bursitis trocantérica

El dolor de cadera causado por la bursitis trocantérica tiene características específicas:
- Dolor localizado: Sensación punzante o ardor en la parte externa de la cadera, que puede extenderse al muslo.
- Dolor al acostarse de lado: La presión sobre la bursa al dormir agrava las molestias.
- Rigidez: Dificultad para mover la cadera, especialmente después de estar sentado o al despertar.
- Sensibilidad al tacto: La zona sobre el trocánter mayor duele al presionarla.
- Empeoramiento con actividad: Caminar, subir escaleras o correr intensifica el dolor.
Según American Journal of Sports Medicine (2019), el 60% de las mujeres con dolor de cadera persistente presentan bursitis trocantérica como causa principal o secundaria.
Otras posibles causas de dolor de cadera en mujeres
Aunque la bursitis trocantérica es común, otras condiciones también pueden causar dolor en la cadera:
- Osteoartritis: Desgaste del cartílago articular, más frecuente en mujeres mayores de 50 años.
- Tendinitis del glúteo medio: Inflamación de los tendones cercanos a la bursa.
- Fractura por estrés: Común en mujeres atletas o con osteoporosis.
- Dolor referido: Problemas de la espalda baja (como hernia discal) o sacroilíacos pueden irradiar a la cadera.
- Endometriosis: En mujeres jóvenes, el tejido endometrial puede causar dolor pélvico que se siente en la cadera.
Un diagnóstico preciso es crucial, ya que los tratamientos varían según la causa.
Cómo aliviar el dolor de la bursitis trocantérica
Manejar la bursitis trocantérica combina estrategias caseras, médicas y cambios en el estilo de vida para reducir la inflamación y prevenir recurrencias.
Reposo relativo y modificación de actividades
Evita actividades que ejerzan presión sobre la cadera, como correr o estar de pie por largos periodos. Según Journal of Orthopaedic & Sports Physical Therapy (2019), el reposo relativo reduce la inflamación en un 30% en las primeras 2 semanas.
Consejo práctico: Alterna periodos de sentado y caminado cada 30-45 minutos para evitar rigidez.
Aplicación de frío y calor
- Usa compresas frías (10-15 minutos, 2-3 veces al día) durante los primeros 3 días para reducir la inflamación aguda.
- Después, aplica calor (15 minutos) para relajar los músculos y mejorar la circulación, según Physical Therapy (2018).
Consejo práctico: Envuelve una bolsa de hielo en una toalla para proteger la piel.
Ejercicios de fortalecimiento y estiramiento
Fortalecer los músculos de la cadera y glúteos reduce la presión sobre la bursa. Realiza ejercicios como:
- Puente de glúteos: Acuéstate boca arriba, flexiona las rodillas y eleva la pelvis (10 repeticiones, 2 series).
- Estiramiento de banda iliotibial: Cruza la pierna afectada detrás de la otra y estira hacia el lado opuesto (mantén 20 segundos, 3 veces).
Según Clinical Rehabilitation (2020), estos ejercicios mejoran la movilidad en un 25% tras 4 semanas.
Consejo práctico: Consulta a un fisioterapeuta para un plan personalizado.
Medicamentos antiinflamatorios
Toma antiinflamatorios no esteroides (AINEs, como ibuprofeno) según las indicaciones de tu médico para aliviar el dolor y la inflamación. En casos graves, un médico puede recomendar inyecciones de corticosteroides.
Consejo práctico: No uses AINEs por más de 7 días sin supervisión médica.
Cambios en el calzado y postura
Usa calzado con soporte de arco y amortiguación para reducir el impacto en la cadera. Evita tacones altos o zapatos planos sin soporte. Si hay diferencias en la longitud de las piernas, considera plantillas ortopédicas.
Consejo práctico: Visita a un podólogo para evaluar tu pisada y recomendar plantillas.
Plan de acción para manejar el dolor de cadera
Este plan de 10 días te ayudará a reducir el dolor y prevenir recurrencias de la bursitis trocantérica:
Días 1-3: Controla la inflamación
- Aplica hielo (10 minutos, 3 veces al día) en la cadera afectada.
- Evita actividades de alto impacto (correr, subir escaleras).
- Duerme del lado no afectado o boca arriba con una almohada entre las rodillas.
- Observa: Nota si el dolor disminuye o si la sensibilidad mejora.
Días 4-7: Introduce ejercicios suaves
- Comienza con estiramientos suaves (como el de la banda iliotibial) 5 minutos al día.
- Cambia a compresas calientes (15 minutos) antes de los ejercicios para relajar los músculos.
- Usa calzado cómodo y evita estar de pie más de 1 hora seguida.
- Observa: Evalúa si la movilidad mejora o si el dolor al caminar disminuye.
Días 8-10: Fortalece y evalúa
- Añade ejercicios de fortalecimiento (puente de glúteos, 10 repeticiones diarias).
- Monitorea el dolor al acostarte o caminar. Si persiste, consulta a un médico.
- Planea mantener los ejercicios 3-4 veces por semana para prevenir recurrencias.
- Observa: Revisa si puedes realizar actividades diarias con menos molestias.
Hábitos para prevenir el dolor de cadera
- Mantén un peso saludable: El exceso de peso aumenta la presión en la cadera. Según Arthritis Care & Research (2019), perder un 5% del peso corporal reduce el dolor en un 20%.
- Dieta antiinflamatoria: Consume alimentos ricos en omega-3 (salmón, nueces) y antioxidantes (frutas rojas, espinacas) para reducir la inflamación.
- Ejercicio regular: Practica actividades de bajo impacto, como natación o yoga, 20-30 minutos, 4 veces por semana.
- Postura correcta: Evita cruzar las piernas al sentarte y usa sillas con soporte lumbar.
- Hidratación: Bebe 2 litros de agua al día para mantener los tejidos lubricados.
Precauciones al tratar el dolor
- No ignores el dolor persistente: Si dura más de 10 días o empeora, busca un diagnóstico preciso.
- Evita ejercicios intensos: Correr o saltar puede agravar la bursitis.
- Cuidado con medicamentos: No uses AINEs a largo plazo sin supervisión médica, ya que pueden causar efectos secundarios gástricos.
- Prueba de calzado: Asegúrate de que los zapatos no ejerzan presión adicional en la cadera.
Cuándo consultar a un especialista
Busca ayuda médica si notas:
- Dolor severo que limita caminar o dormir
- Hinchazón o calor persistente en la cadera
- Dificultad para mover la pierna o debilidad muscular
- Síntomas sistémicos, como fiebre o fatiga inexplicable
Un ortopedista, reumatólogo o fisioterapeuta puede realizar pruebas (radiografías, resonancia magnética) para confirmar la bursitis u otra causa. Busca atención inmediata si el dolor se acompaña de fiebre alta o incapacidad para mover la cadera, lo que podría indicar una infección o fractura.
La ciencia detrás de la bursitis trocantérica
La bursitis trocantérica es una causa principal de dolor de cadera en mujeres debido a la anatomía pélvica y factores hormonales. Según Journal of Orthopaedic & Sports Physical Therapy (2019), el 70% de los casos se resuelve con reposo, ejercicios y antiinflamatorios en 6-8 semanas.
Sin embargo, condiciones no tratadas, como desalineaciones o lesiones repetitivas, pueden prolongar la recuperación. Un enfoque combinado de descanso, terapia física y ajustes de estilo de vida es clave para el alivio.
Toma control de tu dolor de cadera
El dolor de cadera en mujeres suele estar ligado a la bursitis trocantérica, una condición tratable con medidas como reposo, ejercicios, compresas frías y calientes, y cambios en el calzado. Al seguir este plan de 10 días, adoptar hábitos preventivos y buscar ayuda médica cuando sea necesario, puedes reducir las molestias y recuperar la movilidad. Escucha a tu cuerpo, actúa con prontitud y prioriza tu bienestar para disfrutar de una vida activa y sin dolor.